Hay que fomentar la inversión en infraestructura y tecnología para mejorar la eficiencia de recursos, señala la Declaratoria de la Organización Mundial de Turismo
Los gobiernos, el sistema de las Naciones Unidas, organizaciones internacionales, instituciones financieras mundiales y regionales y el sector privado deben priorizar el crecimiento verde e inclusivo en el turismo, señala la Declaratoria emitida por la Organizacion Mundial del Turismo (UNWTO, por sus siglas en inglés).
Emitida durante la Conferencia Mundial sobre Empleo y crecimiento inclusivo: Asociaciones para el Turismo Sostenible, la Declaratoria señala que se requiere fomentar la inversión en infraestructura y tecnología para mejorar la eficiencia de recursos, mitigar el cambio climático y separar el crecimiento económico y la degradación ambiental.
Realizado en el marco del Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo, el texto indica que los gobiernos, el sistema de las Naciones Unidas, las instituciones financieras mundiales y regionales y el sector privado cooperarán para promover viajes seguros e ininterrumpidos y desarrollar resiliencia para el turismo, mejorando las capacidades de preparación y gestión de crisis, así como la plena integración del turismo en las estructuras de emergencia.
Además, los gobiernos, el sistema de las Naciones Unidas, las instituciones financieras mundiales y regionales, la academia y el sector privado apoyarán programas que promuevan la educación, la creación de capacidades y el desarrollo de habilidades, particularmente relacionados con la innovación y la tecnología, que generen empleos decentes y oportunidades de emprendimiento, específicamente para jóvenes, mujeres y grupos menos favorecidos.
La academia, en asociación con gobiernos, organizaciones internacionales y el sector privado, deberá promover la investigación sobre turismo y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que sean muestra relevante y den recomendaciones sobre las mejores políticas y estrategias comerciales para lograr los ODS mediante el turismo, incluido el financiamiento adecuado y necesario.
Los gobiernos, el sector privado, los donantes y las organizaciones internacionales y regionales apoyarán el desarrollo de una economía azul, considerando las especificidades y vulnerabilidades de los Estados insulares en términos de recursos naturales, impacto del cambio climático y eventos climáticos extremos, así como la alta dependencia del turismo en el océano para actividades marinas, transporte, protección costera y resiliencia.
La Declaratoria indica que los gobiernos, el sector privado, los donantes y las organizaciones internacionales y regionales apoyarán la creación de un Centro mundial de resiliencia turística en el Caribe, incluido un Observatorio del turismo sostenible, para ayudar a los destinos a prepararse, gestionar y recuperarse de las crisis que afectan el turismo y amenazan las economías y medios de subsistencia.
Añade que los gobiernos del Caribe y el sector privado deben trabajar juntos para avanzar en la integración regional.
La comunidad de donantes reconocerá los amplios impactos del turismo en todas las dimensiones del desarrollo sostenible y aumentará su apoyo al turismo sostenible a nivel bilateral y multilateral, incrementando los esfuerzos y la coordinación en la movilización de recursos para el desarrollo del turismo a través de mecanismos de financiamiento mundiales existentes, así como nuevas facilidades de financiamiento relacionadas con los ODS, incluido el Fondo de Turismo para el Desarrollo de la UNWTO.
En la Declaratoria se insta a los gobiernos nacionales, las autoridades locales y otras partes interesadas a crear un entorno propicio para el sector privado y ofrecer incentivos para que las empresas actúen de conformidad con los principios del Código Ético Mundial para el Turismo de la UNWTO y los 17 ODS.
Además, los gobiernos, las autoridades locales, el sector privado, la academia y la comunidad internacional deben avanzar en la recopilación y el análisis de datos turísticos para medir el impacto total del turismo a nivel nacional y local.
Destaca que el turismo es uno de los sectores socioeconómicos de más rápido crecimiento y resistencia.
Actualmente tiene alrededor del 10 por ciento del PIB mundial; uno de cada diez empleos y el siete por ciento del comercio mundial de bienes y servicios y el 30 por ciento del comercio de servicios.
El turismo, resalta el texto, tiene múltiples vínculos con otros sectores económicos y puede generar oportunidades de desarrollo a lo largo de toda la cadena de valor, particularmente en los países en desarrollo.
Menciona que el turismo tiene el potencial de contribuir, directa e indirectamente, a los 17 ODS y se presenta en tres de los ODS, ademas se basa en la interacción humana entre los visitantes y las comunidades, creando un vínculo que puede promover el entendimiento y la tolerancia intercultural, fomentar el respeto mutuo entre las personas y contribuir así a una cultura de paz en un marco de seguridad.
Es necesario, dice la Declarayoria, comprender la urgente necesidad de movilizar y desbloquear un aumento sustancial en el financiamiento del desarrollo turístico, especialmente en los países en desarrollo, a través de la cooperación para el desarrollo.
Los gobiernos nacionales, las autoridades locales, el sector privado, las instituciones financieras y las partes interesadas pertinentes deben desarrollar un enfoque integral y holístico del desarrollo del turismo para aprovechar el efecto positivo del sector y su efecto multiplicador en las personas, el planeta y la prosperidad, aprovechando su valor como clave contribuyente al desarrollo sostenible, señala la Declaratoria.
Los participantes en la reunión expresaron sus más sentidas condolencias a las familias y amigos de las víctimas de los huracanes que afectaron al Caribe en los últimos meses.
“Nos comprometemos a trabajar juntos para apoyar la recuperación de los destinos afectados y su gente, mientras construimos resiliencia para el sector turístico caribeño. un pilar de los medios de vida de la región”, expresaron.
Fuente: La Crónica/Blanca Estela Botello