
El proyecto inició operaciones hace unas semanas y este miércoles será inaugurado por autoridades federales, estatales, así como por representantes de los corporativos que participaron en la inversión.
El proyecto consta de 113 mil paneles, extendidos sobre una superficie de 90 hectáreas, la instalación tiene una capacidad 35.5 megavatios pico (MWp) y generará 83 mil megavatios hora (MWh) al año.
De acuerdo con el reporte preliminar del proyecto, esta producción sustituye la emisión de más de 60 mil toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera cada año y el objetivo es producir energía limpia renovable al menos durante los próximos 25 o 30 años.
El proyecto fue financiado por el consorcio Balam Fund, que tiene capital mexicano, español, argentino y japonés, en coinversión con BalamCK16, que son fondos de capital privado especializados en la inversión en proyectos de generación de energías renovables.
El proyecto se conectará con la subestación Camargo II de la Comisión Federal de Electricidad.
Entre los socios de Balam está The Rohatyn Group, un gestor de fondos enfocado exclusivamente en mercados emergentes, con 4 mil 200 millones de dólares de activos bajo gestión.
Además está el grupo mexicano de gestión de activos BK Partners, que se enfoca en la industria de turismo y Diamond Renewables, grupo especializado en la inversión y gestión de instalaciones de generación de energía sobre fuentes renovables.
Fuente: El Financiero/Samuel García