De acuerdo con datos de las cuentas públicas de los congresos locales correspondientes al ejercicio fiscal del 2016, 19 legislaturas gastaron en conjunto 1,001.2 millones de pesos (13.7%) adicionales a lo que éstas aprobaron (7,303.2 millones); así, Querétaro, Hidalgo y Puebla fueron las entidades con la mayor variación entre el presupuesto aprobado y el presupuesto devengado.
Lo anterior fue dado a conocer durante la presentación del Informe Legislativo 2017 realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
Éste analiza la composición y confirmación de los congresos locales, el manejo que hacen de los recursos públicos y su desempeño legislativo.
Según datos del Imco, en el Congreso de Querétaro se presupuestaron 299.6 millones de pesos en el 2016; sin embargo, al final del ejercicio se gastaron un total de 493.2 millones, lo que se traduce en 193.5 millones (64.6%) más de lo presupuestado originalmente.
En tanto, en el Congreso de Hidalgo la diferencia entre lo gastado y lo presupuestado fue de 56.7%, ya que se presupuestaron 119.8 millones y se gastaron 187.7 millones; mientras que en Puebla la variación fue de 31.4 por ciento.
Cuatro congresos locales tuvieron modificaciones al alza de entre 20 y 50% (Guanajuato, Guerrero, Tamaulipas y Puebla); siete legislaturas gastaron menos de los presupuestado (Yucatán, Sinaloa, Colima, Tabasco, Chihuahua. Jalisco y Baja California); en tanto, el Congreso de Coahuila fue el único en el que se gastó exactamente lo que se aprobó.
Al corte del informe, no se encontraron disponibles las cuentas públicas del ejercicio 2016 de los congresos de Baja California Sur, Chiapas, Estado de México, Michoacán y Oaxaca.
Al respecto, el director general del Imco, Juan Pardinas, afirmó que uno de los principales problemas existentes es la falta de voluntad por parte de los congresos locales para transparentar los recursos, por lo que “si se cumplieran las leyes se tendrían pasos sustantivos en la dirección correcta”.
Asimismo, señaló que la falta de castigos ante el incumplimiento de la Ley General de Transparencia y la asimetría presupuestal indicativa de ineficiencia en la función legislativa debe ser sancionada, de otra manera sólo queda en “un llamado a misa”.
“No tener sanciones contundentes, que no cumplan con lo establecido en la ley, es un llamado a misa”, dijo.
ALDF, con mayor monto
El informe reveló que la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) es el ente más caro del país, que tiene mayor presupuesto y el que tiene más empleados por diputado.
“Lo que sí podemos afirmar es que la Asamblea Legislativa es uno de los parlamentos más costosos del mundo, por cualquier métrica, sobre todo el recurso por legislador”, mencionó Juan Pardinas.
Mientras que el Congreso de Puebla opera con un presupuesto por diputado de 3.5 millones de pesos, en contraste, la ALDF lo hace con 28.8 millones; es decir, el costo de ocho diputados locales de Puebla equivale a uno de la Asamblea.
“Si se aplicara el presupuesto de Puebla al resto de los congresos habría un ahorro de 9,574.2 millones de pesos (71 por ciento)”, declaró el investigador del Imco, Diego Díaz.
Este año, las legislaturas ejercerán un total de 13,551 millones de pesos, monto que equivale al presupuesto de Baja California Sur (13,910 millones) o al gasto acumulado de 739 municipios en el 2015.
A nivel mundial, el costo por diputado del órgano legislativo (así como los legisladores de Baja California y Jalisco) es superior al de los congresos de 97 países, entre ellos, Japón, India, Alemania, Francia y Portugal.
Asimismo, con 1,903 millones de pesos la ALDF es la que más recursos recibe, mientras que el Congreso de Colima el que menos, con 93 millones.
En conjunto, entre el 2012 y el 2017, los presupuestos de los congresos locales crecieron 11.1% en términos reales al pasar de 10,307.9 a 13,551.3 millones de pesos. En dicho periodo nueve congresos redujeron sus presupuestos (la mayor caída real se registró en Puebla con 22.5%), los 23 restantes presentaron desde incrementos marginales (0.4% en Guerrero) hasta aumentos superiores a 50% (53.1, 61.1 y 69.4% en Michoacán, Coahuila y Michoacán, respectivamente).
Sin transparencia
Para realizar el Informe Legislativo se consultaron 32 sitios web, se revisaron 65 marcos normativos y 32 tomos de cuenta pública. Además se enviaron 800 solicitudes de información (25 a cada congreso), de las cuales 79% fueron respondidas de manera satisfactoria.
Sólo las legislaturas de Campeche, Chihuahua y Sinaloa respondieron satisfactoriamente a 100% de las solicitudes, mientras que los congresos con menor porcentaje de respuestas adecuadas fueron Morelos (36%), Veracruz (32%) y Colima (16 por ciento).
Propuestas
El director del Imco añadió que para mejorar la rendición de cuentas y el desempeño de los congresos locales es necesario cumplir con las obligaciones que ellos imponen en las leyes que aprueban, así como elaborar y publicar un proyecto de presupuesto de egresos con base en el modelo elaborado por el Instituto.
Otra medida sería regular la administración y asignación de recursos para los órganos internos de los congresos (órganos de gobierno, comisiones, comités, centros de estudios, etcétera).
“Apegarse al presupuesto de egresos aprobado y evitar el aumento desproporcionado del mismo fuera de lo establecido en el presupuesto, así como dotar de autonomía financiera a todos los órganos superiores de fiscalización”, agregó.
Fuente: El Economista/Ilse Becerril