El Presidente señala que el origen es la falta de oportunidades; llama a redoblar esfuerzos para un mejor futuro; asiste a Cumbre del Mecanismo de Tuxtla, en Costa Rica.
Al participar en la sesión inaugural de la 16 Cumbre del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla en San José, Costa Rica, el Presidente Enrique Peña aseguró: “el aislamiento no es la solución a nuestros desafíos”, y destacó que nuestro país “enfrenta con convicción retos muy importantes para construir una nueva relación con el gobierno de Estados Unidos”.
Ante los líderes de Mesoamérica el primer mandatario subrayó el trabajo conjunto para superar diferencias a través del diálogo. Dijo estar seguro de que se alcanzará un entendimiento que devenga en resultados positivos para ambas naciones.
“Hoy la presencia de todos ustedes aquí demuestra que el diálogo y la apertura son la vía correcta hacia la integración”, resaltó el mandatario mexicano ante jefes de Estado y de Gobierno, así como representantes de los países que integran el llamado Mecanismo de Tuxtla: Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Belice, Panamá, Colombia y República Dominicana.
En este marco el Presidente Peña enfatizó en que el Mecanismo de Tuxtla “nos ha permitido favorecer el diálogo político, la integración económica y la cooperación para el desarrollo entre nuestros países, y unirnos frente a los retos que compartimos, tanto en el ámbito regional como en el global”.
Expresó su agradecimiento “a todos nuestros países hermanos” por “las muestras de solidaridad y de confianza que han tenido con México durante estos últimos meses”.
En la reunión con sus homólogos, el titular del Ejecutivo federal habló del tema migratorio y aseguró: “Hoy más que nunca, si queremos atender las causas de la migración, los países mesoamericanos debemos ir al fondo del problema, a su origen, que es la falta de oportunidades”.
En este sentido, hizo un llamado a los países de la región para fortalecer la alianza y redoblar esfuerzos para cumplir la promesa de un mejor futuro y, sobre todo, de seguir impulsando de forma decidida la prosperidad de la región.
“La agenda más emblemática que como región debemos atender es la migración. Es prioritario que todos los gobiernos velemos por el absoluto respeto a los derechos humanos de los migrantes, por su integridad física y por su dignidad como personas”, indicó el Presidente.
Luego resaltó: “Para abonar a una buena vecindad es indispensable que cada Nación asuma la parte que le corresponde en el desarrollo integral de sus sociedades y de la región. Sin duda, tenemos el desafío ineludible de generar las condiciones adecuadas para que cada persona pueda encontrar, en su propio país, las oportunidades que necesita para salir adelante”.
Fuente. La Razón/Eunice O. Albarrán