Cae banda que robó a 28 clientes de bancos

SSPDF siguió la pista por seis meses a integrantes de Guerreros Norte; detiene a seis delincuentes; dos son exreos y uno un menor

Las autoridades capitalinas los conocen como Guerreros Norte. Es una banda de ladrones, vecinos del barrio de Tepito, dedicados a asaltar cuentahabientes al norte de la ciudad. La Policía la ha ubicado en al menos 28 robos desde febrero de 2014 con botines que van de los 20 hasta los 200 mil pesos.

Tras una investigación de poco más de medio año la Secretaría de Seguridad Pública capitalina (SSP-DF) atrapó a seis integrantes de este grupo, dos de ellos exreos y uno menor de edad.

La Razón obtuvo un informe sobre la forma de operar de los criminales y una serie de imágenes captadas por las cámaras de la ciudad en las que se aprecia uno de sus atracos, y también el momento justo del operativo para su captura.

En la grabación de su detención se ve a los hampones que buscan escapar a toda velocidad a bordo de un auto; sin embargo, un par de vehículos de la policía les da alcance y les cierra el paso.

Al verse cercados, uno de los delincuentes baja del carro y busca escapar. Mientras dos policías van tras él, los otros desenfundan sus armas y encañonan a los ladrones que iban en el auto y que estaban armados.

Ese día fueron capturados José Gutiérrez, de 34 años; René Rosales, de 28; Héctor Rosales, de 24 (estos dos son exreos); Rogelio Domínguez, de 32; Eligio Díaz, de 29, y el menor Manuel de 17 años.

La Indagatoria. Tras conocer la forma en que operaba esta banda, el secretario Hiram Almeida ordenó a sus elementos hacer un seguimiento e investigación. Así supieron que los ladrones usaban dos autos de lujo para pasar desapercibidos.

En un BMW y en un Bora se estacionaban afuera de bancos mientras dos entraban para buscar víctimas, los otros esperaban en los vehículos.

Una vez que ubicaban a quién asaltarían, los hombres del interior llamaban por teléfono y alertaban a sus cómplices para encañonar a las víctimas en su domicilio y robarles el efectivo.

La Razón/Carlos Jiménez

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